Esta es la ESCALOFRIANTE razón por la cual no debes desvelarte en Semana Santa

La Semana Santa también está llena de teorías, que aunque no están científicamente comprobadas, han alertado a más de una persona. Jueves y Viernes Santo, Sábado de Gloria y Domingo de Resurrección son algunos de los días que componen estas festividades, dando paso a escalofriantes especulaciones a lo largo de los años.

Una de las teorías más sonadas es que las personas "no se pueden desvelar" durante Semana Santa, pues esto implicaría atraer negatividad y malas vibras dentro del hogar. Y es que, según las creencias populares, "el diablo anda suelto" y podría hacerte daño. 

Esta creencia surge apropósito de lo que le pasó a Jesús, quien fue arrestado, maltratado y crucificado en un monte. Algunos religiosos consideran que fue un período donde el mal reinó en la Tierra, por lo que "el diablo andaba suelto" y no había armonía ni paz entre los seres humanos.

El diablo anda suelto en Semana Santa, según las creencias populares 

Otros creyentes consideran que la traición y la injusticia estuvieron presentes por aquellos días, que en la actualidad se conocen como Semana Santa. Por su parte, algunas personas señalan que el "diablo anda suelto" especialmente el Viernes Santo, en donde se recuerda la crucifixión y muerte de Jesús.

Se cree que el diablo hace apariciones durante estas épocas con la finalidad de aumentar el temor, el caos y las tentaciones entre la humanidad. Su objetivo sería el de llevar a la perdición a los religiosos, sobre a todos aquellos que opten por mantenerse despiertos a las altas horas de la noche.

Este ente maligno haría su aparición año con año, cuya finalidad es la de influenciar a los creyentes para caer en tentaciones. Lo anterior ha dado paso a que las personas sientan temor durante esta semana, evitando desvelarse o hacer actividades después de las 12:00 de la madrugada. 

Algunas personas consideran que el mal reina en la Tierra durante estas fechas, por lo que el diablo está presente entre la humanidad para hacer maldades y fechorías. La presencia de sombras, ruidos u objetos moviéndose son algunos de los sucesos que las personas piensan que ocurren ante esta creencia.