¡No lo tires! Reutiliza las cáscaras de frutas de esta forma

Lo que parece ser basura no siempre lo es y uno de los ejemplos más claros son lo que muchos llaman ‘deshechos’ que la naturaleza da y que en muchas ocasiones se olvida que tiene otros usos.

La realidad es que aunque no siempre parezca cierto, todas las cáscaras de las frutas o verduras son aptas para darle una segunda vida y generar menos basura, además de tener más beneficios de todo lo que se puede obtener en estas.

Después de haber consumido cualquier fruta o verdura, todos los días se generan millones de montañas de basura, que aunque en ocasiones aportan otros beneficios, en muchas ocasiones solo son causantes de una gran cantidad de emisores contaminantes.

Las cáscaras, tanto de las frutas, como de los vegetales, representan materia prima que hace que sea posible el poderla reciclar en diferentes aspectos de nuestra vida diaria, al mismo tiempo que ayuda a generar una menor cantidad de basura.

Por ello, a continuación te daremos algunas ideas para darle una segunda vida a tus alimentos y utilizarlos de diferentes maneras benéficas, de forma que no únicamente las uses para crear composta, que es lo que comúnmente se hace.

En caso de que no todas puedan ser empleadas al instante debido al proceso natural de descomposición que tendrán, existe la opción de congelarlas para algunos métodos y utilizarlas durante meses si es necesario.

¿Cómo reutilizar las cáscaras de fruta?

Infusiones

Uno de los más sencillos ejemplos es a través de las diferentes infusiones que se pueden lograr. Con ellas se podrán lograr los mejores resultados sacando el mayor provecho de nuestros alimentos que resultarán en excelentes beneficios para la salud.

Cabe mencionar que con esta opción no es necesario comprar las ya tan conocidas bolsas en las que las grandes empresas empaquetan todo tipo de plantas en su versión seca, pues basta con colocar las cáscaras en agua hirviendo y dejarlas reposar algunos minutos. Posteriormente, deben ser filtradas, pero debe consumirse al momento para conservar los nutrientes de lo que acabamos de hacer.

Repostería

En el caso de los cítricos es bastante común usar las cáscaras como decoración de nuestros postres favoritos, con lo que no solo se les dará una hermosa vista, sino también un toque extra de sabor.

Sin embargo, la ralladura de nuestras frutas frescas no es la única forma de emplear estas en la repostería, pues se pueden dejar secar las cáscaras hasta que comiencen a hacerse polvo y este emplearlo como saborizante natural.

Limpieza

Es bien sabido que el limón tiene propiedades desengrasantes, por lo que al incluir un poco de la pulpa de las cáscaras del mismo, es posible generar mejores resultados en la limpieza de los utensilios de la cocina.

Aromatizante

Coloca en un recipiente las cáscaras de los cítricos y añade algunas gotas del aceite esencial de tu preferencia para lograr que su olor sea más potente y estimule el mismo constantemente. Esto también ayudará a darle una función decorativa a las cáscaras en tu hogar.

Colorante

El colorante que se compra comúnmente en el supermercado y viene en presentación líquida o en polvo no es el único disponible, pues es posible darle color a algunas cosas con la cáscara de la fruta. Uno de los mejores ejemplos, es el betabel, que se puede incluir en una olla con agua hirviendo para agregar una prenda que ya no tenga mucho color y con ello lograr revivirla.

Uso estético

Dependiendo del cutis de cada persona, es posible reciclar los residuos de algunas frutas y verduras para colocarlas sobre la piel y lograr mejorar su aspecto. Uno de los ejemplos más comunes es el del pepino, que se utiliza para mejorar el aspecto del contorno de los ojos, además de relajar esta área; sin embargo, existen algunas otras opciones.

La cáscara del plátano puede ayudar a las personas con cutis seco a tener más flexibilidad en la piel; mientras que para un cutis graso con tendencia al acné, es posible utilizar otro tipo de residuo como el del jitomate, lo que ayuda a neutralizar la grasa.

Tocino vegano

La cáscara del plátano es una de las mejores opciones para reciclar, pues puede aportar diferentes nutrientes y mucho sabor a un nuevo platillo. Como una opción vegana, esta es posible usar para crear un sustituto de tocino vegano bañándolo en salsa de soja, paprika, sal y pimienta y dejándolo reposar por al menos 45 minutos para posteriormente llevar al horno por 10 minutos con una temperatura de 180°.