Cáncer de mama: ¿Cómo hacer una autoexploración?

¡Es muy fácil!

La pronta detección salva vidas, por eso es importante la autoexploración

Es curable si se detecta a tiempo (Getty).

El cáncer de mama es el tumor maligno más frecuente a nivel mundial, de hecho, según información difundida por la Secretaria de Salud, cada minuto se contabilizan dos nuevos casos en todo el planeta, pero debido a que no se saben las causas exactas de su aparición, la pronta detección a través de la autoexploración es la mejor arma que tenemos para evitar complicaciones o un desenlace fatal.

Aunque los hombres no están exentos de padecer esta enfermedad, en México representa la primera causa de muerte por cáncer en mujeres y se sabe que puede desencadenarse por factores hereditarios, reproductivos, como el uso prolongado de anticonceptivos orales o por el estilo de vida, como el consumo de alcohol, sobrepeso y falta de actividad física.

Para detectarlo y atenderlo a tiempo, lo mejor que puedes hacer es una autoexploración de mamas, es muy sencilla y puedes hacerlo en la comodidad de tu casa con estos sencillos pasos:

1.- Párate frente a un espejo, con los hombros rectos y los brazos junto a la cadera. Observa si las mamas poseen tamaño, forma y color normal, tienes que identificar que no haya alguna deformación o inflamación visible.

Tienes que informar a tu médico de inmediato si notas la formación de un hoyuelo, sarpullido, arrugas o bultos en la piel. También checa que no tengas un cambio de posición del pezón o presencia de pezón invertido; es decir, que parezca que en vez de sobresalir, se encuentra “metido”.

2.- Levanta los brazos y observa fijamente, tienes que fijarte si en esta posición ves las mismas alteraciones, hay ausencia o presencia de otras anormalidades.

3.- Frente al espejo observa si sale algún tipo de líquido de uno o ambos pezones, esta sustancia puede ser transparente, lechosa, amarillenta o incluso sangre.

4.- Ya que observaste frente al espejo, acuéstate y pálpate las mamas con las manos invertidas; es decir, la mama izquierda con la mano derecha y viceversa. Tiene que ser un tacto firme y pausado, con las yemas de los dedos.

Los dedos deben de mantenerse rectos y juntos, en movimientos circulares del tamaño aproximado de una moneda y sigue un patrón para asegurarte de palpar todo el tejido mamario, puedes ir desde la clavícula hasta la parte superior del abdomen y desde la axila hasta el escote o comenzar con el pezón y avanzar en círculos hasta llegar al borde exterior.

Para explorar la piel y tejidos superficiales ejerce una leve presión, para llegar al tejido ubicado en la parte media de las mamas, una presión moderada y para el tejido profundo, una presión firme.

5.- Repite este procedimiento estando de pie o sentada.

  • Dulce Gamero
  • Coordinadora de Revista Fama. Egresada de Comunicación y Periodismo, orgullosamente UNAM. En MILENIO desde 2017. Espectáculos, música y entretenimiento.