Shakira se lleva las palmas tras regalar boletos a padre e hija para su concierto en Monterrey
CelebridadesLa cantante colombiana tuvo un noble gesto con sus fanáticos mexicanos; así fue el momento
Shakira inició su gira de conciertos en México, siendo nuestro país su última parada en Latinoamérica antes de iniciar en Estados Unidos y Europa. La cantante colombiana eligió las paradisíacas tierras de Monterrey para comenzar con 'Las Mujeres Ya No Lloran World Tour', el cual celebra lo mejor de su carrera artística a lo largo de los años.
Tal parece que los asistentes quedaron con un buen sabor de boca, pues más de uno coreó y bailó el pasado miércoles 12 de marzo desde el Estadio BBVA. Además, algunos afortunados tuvieron la oportunidad de conocer a Shakira en un meet & greet, el cual quedó grabado en su corazón por siempre.
Por si fuera poco, la historia de un padre e hija comenzó a tomar fuerza en redes sociales, luego de revelarse que Shakira les regaló boletos para el concierto. Se trata de Ramiro Ibarra, un padre de familia que cumplió su sueño de ver a la cantante colombiana en vivo, junto a su pequeña hija.
Padre e hija conocieron a Shakira en su primer concierto de Monterrey
Ramiro Ibarra intentó conseguir entradas para 'Las Mujeres Ya No Lloran World Tour' una noche antes, por lo que hizo una larga fila con el sueño de conseguir boletos. Aunque todo parecía perdido, el joven se llevó una grata sorpresa al ser sorprendido por Shakira, pues hasta tuvo la oportunidad de conocerla.
"Hoy esas lágrimas fueron de felicidad", escribió en sus historias de Instagram, en donde mostró una foto al borde de las lágrimas junto a su hija. La abuelita de la menor también los acompañó al concierto, por lo que toda la familia vivió una noche espectacular de pies a cabeza.
Padre e hija lucieron una camiseta rojas con las iniciales 'SH', haciendo referencia al nombre del club de fans mexicano, 'Shakpulines'. El momento no pasó desapercibido en redes sociales, pues varios usuarios destacaron la humildad de la colombiana para atender a sus fanáticos y estar al pendiente de ellos.