Así era Griselda Blanco; la también llamada ‘viuda negra’ del narcotráfico

El 3 de septiembre de 2012, la figura de Griselda Blanco, la temida narcotraficante colombiana, llegó a su fin de manera paradójica: acribillada a las afueras de una carnicería de Medellín. Este acontecimiento marcó el final de una vida llena de lujos, excesos y crímenes, pero también el inicio del legado de una mujer que se convirtió en la primera gran narcotraficante mujer de la historia.

La vida de Griselda Blanco será retratada en la próxima serie de Netflix, titulada "Griselda", donde la talentosa actriz Sofía Vergara dará vida a la infame narcotraficante. Aunque la serie aún no se ha estrenado, ya está envuelta en polémica debido a problemas con la familia de la Griselda original.

¿Quién fue Griselda Blanco? La narcotraficante ‘temida’ hasta por Pablo Escobar

A pesar de que el colombiano Pablo Escobar ha sido el narcotraficante más famoso de la historia, él mismo expresó su temor hacia Griselda Blanco: "El único hombre al que temo en este mundo es una mujer y se llama Griselda Blanco". Esta frase, apócrifa o no, encapsula la brutalidad y despiadada naturaleza de la narcotraficante.

Griselda Blanco, también conocida como La Madrina de la Droga, nació en septiembre de 1943 en circunstancias rodeadas de incertidumbre y leyendas. Su madre, Ana, una prostituta toxicómana, la llevó a huir de los malos tratos de sus padrastros. Con apenas 11 años, Griselda lideraba una banda de carteristas en Medellín, ciudad que se convirtió en el epicentro de sus actividades delictivas.

Griselda Blanco no solo fue pionera como mujer en el mundo del narcotráfico, sino que también llevó una vida plagada de crímenes. Se dice que cometió su primer asesinato a la edad de 11 años y, a los 13, se enamoró de "El Pestañitas", un delincuente con el que tuvo tres hijos.

A pesar de enfrentar periodos de prisión en diferentes momentos de su vida, Griselda siempre encontró la manera de mantener su imperio criminal. Su vida turbulenta y su impacto en el mundo del narcotráfico hacen de Griselda Blanco una figura fascinante y controvertida, cuya historia llegará a millones de espectadores a través de la serie de Netflix, arrojando luz sobre los oscuros recovecos del crimen organizado.